Malos Hábitos Alimenticios de por Vida


 

Malos Hábitos Alimenticios de por Vida

Imagínese que el otro día voy a almorzar a un pequeño café y al poco tiempo entró una mujer, su esposo y una niñita de casi dos añitos, lo interesante que pasó con ellos fue que en un momento la mujer le pregunta al esposo si compartirá la soda con su hija y él dice que sí.

A mí lo que me sorprendió era de que ella pensaba que estaba completamente bien darle eso a la pequeña y pensé ¡Dios mío! qué pena porque a esa edad ya está aprendiendo a comer comida y bebida que es poco saludable para ella, a largo plazo le va a hacer daño. Me hizo recordar que muchos de los hábitos alimenticios que uno tiene que son malos provienen de nuestra niñez. Uno aprendió a comer y a tomar ciertas cosas y ahora que uno es adulto es muy difícil decir no a esas cosas. Por eso es que el componente mental es súper importante. El chiste no es de hacer las cosas por poco tiempo pero de poder tener esa constancia de comer de manera saludable, de tomar bebidas saludables y decir no a la comida basura, todo lo que es procesado.

Hay ciertas cosas que sabemos comer tan bien que ni siquiera tenemos que pensar en ellas. Automáticamente, en un chasquido de dedos, los hacemos de una manera muy irreflexiva porque eso es lo que siempre hemos hecho y es por eso que cuando se trata de cambiar los patrones de alimentación, realmente se necesita refuerzo y necesitas tener ese apoyo para que tu mente puede aprender un nuevo patrón, uno que lo lleve a ser feliz, saludable y sentirse cómodo con su propio cuerpo, así que si usted es alguien que realmente ha estado luchando con problemas de alimentación, sepa que mucho de eso no es culpa suya, mucho de es simplemente un mal acondicionamiento.

Es simplemente haber hecho lo mismo otra vez. Lo bueno es que puedes volver a entrenar tu mente y es completamente posible tomar el control de tus hábitos alimenticios y hacer que vuelvas a estar en el asiento del conductor, viviendo la vida de la manera que quieres vivir.

Tal vez sea una de esas situaciones en las que nunca has vivido y aunque no lo sepas es posible cambiar tus hábitos alimenticios y es posible tener una relación sana con la comida.

Muy bien chicos, es casi de noche aquí en Los Ángeles. Voy a salir. Que tengas una noche maravillosa.

 

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