La Trampa de la Terapia de las Compras Para Aliviar el Estrés
Según una investigación al menos 52% de los encuestados admitió haber ido de compras para bajar su nivel de estrés. ¿Qué compraron? Ropa en su mayoría. También se encontró que más de la mitad usaron su tarjeta de crédito, cosa que al final puede terminar generando bastante estrés. Muchos de los encuestados hicieron compras sin tener en cuenta si podían pagarlo o no. El tener este tipo de comportamiento puede generar mucho estrés en tus relaciones y también empeorar tu situación económica.
Éstos son algunos consejos que te ayudarán a controlar tus gastos:
1. Pregúntate por qué quieres comprar algo.
Hace años yo misma solía exagerar con las compras no porque necesitaba algo sino porque en ese momento, me sentía muy vacía. Supongo que trataba de llenar el vacío que había en mi vida comprando cosas. En el momento de comprar me sentia super bien pero despues esa emocion se iba haciendo que tuviera que comprar más cosas. Llegué a tener dos habitaciones completamente llenas de ropa y muchas de esas cosas todavía tenían las etiquetas de la tienda. Si adelantamos al día de hoy, ahora me siento mucho más satisfecha con mi vida, y veo el salir de compras de una manera distinta. Sólo compro lo que necesito verdaderamente y ya no gasto sumas exorbitantes en artículos de lujo porque esas cosas ya no significan lo mismo para mí. Si estás exagerando con las compras te sugiero que vengas a tomar sesiones de hipnoterapia para que puedas llegar al fondo de lo que está haciendo tu mente.
2. Escoge un mejor relajador de estrés sobretodo si eres un comprador frecuente.
Llegó la hora de tomar un hobby como el arte, la lectura, irse en bicicleta, yoga o la excursión. Encuentra algo que te ayude a disminuir el estrés sin tener que gastar. Con suficiente tiempo puedes entrenarte para controlar tus gastos.
3. Mantente firme durante la temporada festiva.
El controlar las tendencias de compras compulsivas puede ser más difícil durante las fiestas porque hay ofertas por todos lados y las tiendas en estas temporadas tienen las mejoras ofertas disponibles. Cuando sientas la tentación, recuerda que es la temporada para dar y no para recibir. ¡Igual también recibirás regalos!
4. Planificación previa.
Comprarse una botella de perfume o una linda taza de café es tan tentador. Si no confías en ti mismo lo suficiente como para ir de compras solo o sola, pídele a un ser querido de confianza que te acompañe y dile que es muy importante que no te resbales. Y si estás comprando por la computadora, elabora una lista de cosas que vas a comprar y no te distraigas con nada más.
5. Por último, recuerda que las cosas no dan la felicidad.
El ir de compras puede ser como una droga que te hace sentir bien por un tiempo muy corto. Pero puede resultar en problemas en tus relaciones, inestabilidad económica y el tener una casa llena de cosas. No es algo que debes tomar a la ligera. Cuando compras y compras te quedas sin dinero, sin espacio y sin tiempo en el algún momento. Piensa bien sobre lo que realmente necesitas. Compra solo lo que necesites absolutamente. Podrás sobreponerte al anhelo de comprar compulsivamente con unos pocos ajustes mentales, unas aficiones nuevas y algunos límites auto-impuestos.
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