Incluso frente a eventos desafortunados, todavía tenemos una opción. Reaccionar o responder. ¿Cuál escogerás?
Cuando todo va súper bien, es fácil dejarse llevar por la corriente. Otra cosa es cuando las cosas son muy diferentes a como te gustaría que fueran. Ahí es cuando eres capaz de probar de qué estás hecho realmente.
La forma en que decidas lidiar con las cosas ahora determinará no solo tu estado mental actual sino también tu futuro.
Elige sabiamente y haz lo mejor que puedas.